miércoles, 21 de diciembre de 2011

ANALISIS HISTORICO POLICIAL EN EL CONTEXTO DE LA REALIDAD NACIONAL

ANALISIS HISTORICO POLICIAL EN EL CONTEXTO


DE LA REALIDAD NACIONAL

Expositor: Gral PNP Mario Cabanillas Chávarry

Señores congresistas, señor Ministro del Interior, estimados colegas policías y público asistente al presente Forum

Nnuestro fraternal saludo y a la vez agradecimiento por haber considerado nuestra participación en este importante evento; gesto democrático que nos permitirá evaluar el tratamiento político que se viene dando a la función de policía en el país y el proceso de unificación institucional de la Policía Nacional; en este ámbito trataré el tema: Análisis histórico de la policía en el contexto de la realidad nacional

La policía desde los inicios de la evolución humana, siempre estuvo ligada al resguardo del buen orden, de la polis, comunidad, ciudad, nación y Estado; proceso histórico en el que los Incas no solamente construyeron una de las siete culturas que existen en el mundo, sino también la única y más grande policía del continente americano

Este genuino desarrollo nacional, cambió de rumbo con el coloniaje y la cultura occidental impuesta por el imperio español y con éste un conjunto de periódicas organizaciones primarias de policía como los Serenos y Alguaciles

Durante las primeras tres décadas de la República se sucedieron 23 presidentes de facto; período de inestabilidad política que imposibilitó consolidar el normal funcionamiento del Estado y de sus principales instituciones como la policía, entre éstas las Milicias Cívicas y la Guardia Nacional propuestas por los libertadores; recurriendo a los rezagos de las policías coloniales

El segundo intento para organizar la policía se produjo en la década de 1850-60, al crearse la Gendarmería como una Institución Policial de carácter militar; crecimiento que fue neutralizado por el primer Presidente civil libremente elegido don Manuel Pardo al crear la Guardia Civil en 1873; estas instituciones policiales tuvieron una meritoria participación durante la guerra iniciada por Chile contra nuestra patria el año 1879; acción meritoria por la cual el Congreso de la República reconoció el primer Héroe Nacional de la policía

Culminada esta infausta etapa, lejos de aunar esfuerzos para la reconstrucción nacional, nos vimos envueltos por cuatro décadas en otro fase de inestabilidad política y social; situación por la cual para el resguardo del orden social, otra vez acudimos a los moldes policiales heredados de la colonia

Con el gobierno del Presidente Augusto Leguía, no solamente se logró estabilidad política y económica; sino que también se ejecutó la más grande reforma policial de la República; para el efecto se contrató una misión española, se inauguró la Escuela Nacional de Policía y se organizó la Guardia Civil como la Institución Policial fundamental del Estado, con el soporte técnico de un Cuerpo de Investigación y Vigilancia y en el campo de la seguridad se creó la Guardia Republicana

Con la presencia del Presidente Luis Sánchez Cerro, se inició otro ciclo de inestabilidad y desorden, período en el que se intento disolver a la Guardia Civil provocando la reacción unánime de sus integrantes, los cuales al concentrase en la Fortaleza de San Felipe fueron repelidos por tierra, mar y falleciendo 160 Guardia Civiles; esta situación se agravó con los lamentables sucesos de 1932, con un saldo de numerosas víctima, fisuras, antagonismos y resentimientos entre un importante grupo de civiles y uniformados, cuyos efectos repercutieron por muchos años

En la Constitución de 1933 se incluyo el Orden Interno como responsabilidad política del Presidente de la República, aunque éste no fue desarrollado en el ámbito policial

En el conflicto con el Ecuador en 1941, la policía estuvo a la vanguardia en defensa de la patria, valerosa acción por la cual se reconoció nuestro segundo Héroe Nacional

Por otro lado con el trascurso del tiempo, el Cuerpo de Investigación y Vigilancia fue evolucionando hasta alcanzar su propia Dirección en 1948, independizándose de la Guardia Civil en 1950 al pasar al Ministerio del Interior; en 1960 se denominó Policía de Investigaciones del Perú, luego se le asignó las funciones de investigación e identificación y por último los grados militares; consolidándose de esta manera como otra Institución Policial del país

En las guerrillas de 1965 en el centro del país, la policía como siempre acudió a restablecer el orden y la paz social, enfrentamientos en los que dieron la vida 69 Guardia Civiles; por ésta destacada labor el Presidente Fernando Belaunde concedió a la Guardia Civil el titulo honorifico de “Benemérita de la Patria “

Durante el gobierno militar del Presidente Juan Velasco, la Guardia Republicana fue incorporada al Ministerio del Interior, iniciándose como otra Institución Policial; en el año de 1969 se expidieron las Leyes Orgánicas de las tres policías, en las cuales se consignó que donde no se encuentre la Policía de Investigaciones, la investigación será asuma por la Guardia Civil y donde no existan las dos anteriores por la Guardia Republicana; esta situación acentuó los rozamientos públicos entre sus integrantes, los que fueron magnificados por la prensa junto con algunos hechos de corrupción policial

En 1980 al asumir el gobierno el Presidente Frenando Belaunde, Sendero Luminoso inició su lucha armada contra el Estado y la población, al que se sumó luego el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru; generando caos y zozobra en la población; frente a este accionar terrorista la policía fue el primer escudo de contención, perdiendo la vida 1362 policías, heridos 951 y discapacitados 326; valioso legado que todos los peruanos tenemos la obligación moral de reconocer y agradecer

Cabe recordar que en este lapso la policía por decisión política concentró sus efectivos para repeler la demencial acción terrorista dejando sin resguardo a la población, vacío que generó el incremento delincuencial y la inseguridad ciudadana que hoy padecemos

Al asumir el gobierno en 1985 el Presidente Alan García anunció una nueva reorganización policial, procediendo luego a desarticular las Instituciones Policiales, descabezando a sus principales comandos al sorprenderlos con su pase a la situación de retiro por los medios de comunicación social, procediendo luego a fusionar las Instituciones Policiales y creándose la actual Policía Nacional; este proceso no llegó a culminarse debido a la generalización de la violencia terrorista y la profundización de la crisis económica

Con el gobierno del Presidente Alberto Fujimori en la década de 1990 - 2000, se acentuó la lucha contra el terrorismo y la policía fue puesta a disposición de los comandos políticos militares en los Estados de Emergencia; se suprimió el ingreso a la Escuela de Sub Oficiales y en 1999 se expidió su Ley Orgánica

Con el gobierno del Presidente Alejandro Toledo bajo el supuesto de desmilitarizar y despolitizar a la policía para hacerla supuestamente comunitaria y de naturaleza civil, en el año 2002 se procedió a su reestructuración; en este campo se creó un sistema de seguridad ciudadana casi paralelo a la estructura policial dependiente del Ministerio del Interior en el que se incluyó algunas unidades policiales bajo la dependencia política de los gobiernos regionales municipales

En esta breve evaluación histórica, cabe resaltar que la realidad nacional donde se desenvuelve nuestra policía es compleja, problemática, con un conjunto de contradicciones sociales, económicas, jurídicas y políticas, juntamente con una dosis de extrema violencia social y delincuencial; problemática que es difícil enfrentar con los escasos recursos económicos y logísticos que tiene la policía para neutralizarlos

Como se puede apreciar, el poder político siempre ha sometido a la policía a periódicas reformas y contrarreformas pero sin presupuesto alguno para implementarlas imposibilitado su consolidación institucional; como muestra, veamos algunas normas constitucionales, legales y decisiones políticas que limitan la función policial:

- “ La detención policial solo procede en los casos de delitos flagrantes o por orden judicial, poniendo el detenido a su disposición en el término de 24 horas “; con estas limitaciones que se puede hacer frente a los incalculables delitos y faltas que se cometen contra los ciudadanos



- “ La policía previene, investiga y combate de la delincuencia “, no obstante para la investigación se le subordina al Ministerio Público, generándose duplicidad funcional y de comando



- “ Los Municipios pueden establecer servicios de Seguridad Ciudadana “, para lo cual cuentan con el cuantioso tributo del Serenazgo; no obstante la policía según su Ley es la responsable de dicha seguridad



- El Código Procesal Penal, establece la figura del Fiscal Policía, no da validez a las declaraciones hechas ante ésta y remplaza al Atestado Policial por un simple Informe



- El Código de Contravenciones de Policía por falta de medidas coercitivas y disuasivas, resulta impracticable



- Nuestro ordenamiento jurídico contiene un conjunto de nomas benefactores para los que delinquen, creando un ambiente de impunidad y anomia que perjudica a los derechos de los demás



- La estructura policial es constantemente modificada para hacerla piramidal o militar, sin tener en cuenta su carácter funcional policial, para lo cual se requiere la combinación estratégica de ambas características



- El Orden Interno carece de Ley no obstante de haber pasado 23 años de su inclusión en la Constitución de 1979 como la finalidad fundamenta de la policía



- El ancestral Orden Público que se regía por un antiguo Reglamento de Control de Disturbios de la Guardia Civil, también carece de Ley no obstante los persistentes trastornos públicos que tiene que enfrentar



- A los policías se califica de militares, no militares o agentes civiles; sujetos a la Justicia castrense o al fuero común, sin tener en cuenta su identidad policial; para cuyo tratamiento se requiere la expedición de un Código de Justicia Policial



- Para amenguar su situación económica los policías están autorizados para vender sus vacaciones y horas libre a particulares, en desmedro de su descanso, vacaciones, salud, familia, autoridad y prestigio

- Para una unificación policial no solo se requiere la decisión política, sino la participación consciente de sus integrantes, sus experiencias, conocimientos, reglamentaciones, valores, usos y costumbres sobre los que edificara y modernizará la actual Policía Nacional



En esta brevísima intervención quisiera dejar en claro que la doctrina policial en nuestro país se sustenta en dos corrientes existentes en el mundo; la francesa que ubica el poder y la función de policía del Estado en el Poder Ejecutivo o Administrador de donde se deriva el Orden Publico considerado como el fin de la policía y la anglosajona o Norte Americana en el Poder Legislativo del cual emana el Poder de Policía del Estado; el Perú recoge ambas concepciones y para su concretización ha previsto constitucionalmente el Orden Interno como atribución del Presidente de la Republica y finalidad fundamental de la Policía Nacional; para una mejor comprensión apreciemos el esquema siguiente:











Para la doctrina francesa el Orden Público es el fin de la policía

y así se mantiene así en algunos países























Este cuadro contiene la síntesis oficial de la doctrina policial, sobre el Orden Interno, Orden Público y Seguridad Ciudadana



La Seguridad Ciudadana, según su Ley; se define como una acción coordinada del Estado y la Sociedad, para asegurar la convivencia pacífica, erradicar la violencia, mantener la utilización pacífica de las vías y espacios púbicos; así como contribuir a la prevención de los delitos y faltas

Esta definición contiene aspectos de Orden Púbico y de Seguridad Ciudadana, que complican la doctrina referente al Orden Publico y el Orden Interno y pone a la policía en una difícil situación frente a los conflictos sociales en los que algunos presidentes regionales y alcaldes son justamente los que dirigen los desordenes públicos como es el caso de Cajamarca, no obstante de ser estos los responsables de velar por el Orden Social en sus jurisdicciones al presidir los Comités de Seguridad Ciudadana

Señores, para superar la problemática estructural de la función de policía del Estado y de nuestra policía en el Perú, se requiere el reordenamiento constitucional y normativo de la función de policía del Estado y la modernización institucional de la Policía Nacional, respaldada con un pliego presupuestal para su implementación y para la educación profesional de sus integrantes creando la Universidad Policial prevista en el nuevo proyecto de Ley de la Policía Nacional; así construiremos juntos la policía que el Perú necesita para una gobernabilidad democrática y para vivir en un ambiente social de orden, seguridad y paz, propicio para el desarrollo nacional y la plena realización de la Persona Humana, como fin supremo de la Sociedad y el Estado



GRACIAS